Este verano la Consejería de Educación ha licitado de nuevo los contratos para el servicio de comedor escolar en toda la Comunidad, sustituyendo a los anteriores que llevaban vigentes cuatro años. En esta contratación, el aspecto más novedoso ha sido la intención declarada de ir suprimiendo las cocinas que todavía quedan en muchos Colegios públicos, en las que se elabora la comida el mismo día en que se va a consumir, para sustituirlas por el servicio mediante catering en frío, ya vigente en muchos otros Centros, en el cual la comida se elabora en unas cocinas centrales, se conserva ya cocinada en frío y se distribuye a los Colegios, donde se regenera en unos hornos especiales para ser servida,
La noticia de esta supresión progresiva de las cocinas se hizo ya pública antes del comienzo del proceso de licitación, por ejemplo en este artículo de El Correo de Burgos; y posteriormente se materializó en las condiciones del contrato, en el cual se hacía constar expresamente qué Centros han de pasar de la cocina al catering en el curso de la duración de este contrato (tres años). En Burgos los Colegios se han dividido en los dos lotes que se reflejan en estas imágenes (pueden verse también pinchando aquí), y en ellos los que aparecen marcados con un asterisco son los que van a ser sometidos al cambio.
Fapa-Burgos opina que el sistema de cocina en el sitio tiene varias ventajas sobre el catering, y por tanto no comparte esta decisión y va a plantearse las posibles acciones a llevar a cabo al respecto. De ello se hablará en nuestra Asamblea, a celebrar el próximo día 26 de octubre.
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