En estos comienzos del tercer trimestre escolar, todas las dudas están centradas en cómo va desarrollarse la actividad lectiva y la posterior evaluación. Parece muy difícil que se vuelva a las aulas, como no sea unos pocos días del mes de junio, y hay que afrontar la necesidad de seguir sin clase presencial y con la relación profesorado-alumnado centrada en las nuevas tecnologías. Ante las muchas dificultades que genera esta situación, se ha reunido laa Conferencia Sectorial de Educación (el Ministerio con las Comunidades Autónomas), en la que se ha generado un documento de acuerdos sobre la forma de desarrollar este trimestre que se puede consultar pinchando en este enlace. De este documento vamos a destacar ahora el siguiente párrafo:
Las Administraciones educativas, los centros y el profesorado revisarán los currículos y las programaciones didácticas para centrar las actividades lectivas del último trimestre en los aprendizajes y competencias imprescindibles que deberían desarrollar los estudiantes, en función de su etapa, curso, área o materia, renunciando a un cumplimiento exhaustivo de los propósitos iniciales, flexibilizando sus planes de trabajo y cuidando de no penalizar o perjudicar el bienestar de su alumnado ni sobrecargarlo de tareas excesivas.
Por su parte, la Consejería de Educación de Castilla y León, después de la Conferencia, ha publicado una Instrucción sobre la actividad educativa en el tercer trimestre (para verla entera pinchar aquí) de la que destacamos este punto:
El proceso de enseñanza debe ser individualizado, primando el refuerzo y la consolidación de los aprendizajes realizados durante el primer y segundo trimestre, priorizando la consecución de las competencias del alumnado sobre la finalización de los temarios y teniendo en cuenta los medios con los que cuenta y su disponibilidad, el apoyo familiar o sus necesidades específicas de apoyo educativo.
Lo que nos dicen estos documentos es que la actividad lectiva de este tercer trimestre debe centrarse en las competencias y no en los contenidos. Una idea que en Fampa-Burgos celebramos, pues hace mucho tiempo que Ceapa, y todas las organizaciones integradas en ella como la nuestra, defiende que la educación se centre en las competencias, es decir, en habilidades y herramientas para asimilar la información y aplicarla, más que en aprender la información misma, que actualmente está al alcance de cualquiera con las nuevas tecnologías. Este enfoque resulta absolutamente necesario en la situación actual, en que la transmisión de los contenidos resulta muy complicada y llega de forma desigual al alumnado, mientras que la adquisición de competencias es mucho más comprensiva e inclusiva para la generalidad de los alumn@s. Es la idea que trata de expresar el cartel del comienzo de este artículo.
Son las competencias llamadas ahora "clave", anteriormente "competencias básicas". La clasificación puede variar, pero se las divide normalmente en ocho:
- Competencia en comunicación en lengua materna
- Competencia en comunicación en lenguas extranjeras
- Competencia en matemáticas y competencia básica en ciencia y tecnología
- Competencia digital
- Competencias sociales y cívicas
- Conciencia y expresión culturales
- Competencia para aprender a aprender
- Sentido de la iniciativa y espíritu de empresa
Su reconocimiento normativo como elemento básico de la educación se encuentra en la Orden del Ministerio de Educación de 21-enero-2015, pero el lugar donde mejor las encontráis resumidas y descritas es en el calendario anual de CEAPA, que muchos conocéis y que se basa todos los años en ellas. En la imagen adjunta podéis ver ese resumen y descripción, contenido en la última página del calendario.
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